lunes, 5 de abril de 2010

La Academia Argentina de Letras se complace en recibir a un célebre escritor que es, además por supuesto, un verdadero artista del lenguaje, bajo el juicio de críticos y lectores. Su obra publicada se inició con un libro de poemas Veracidades de la madre naturaleza en 1997, abarcando setenta y un premios a nivel nacional y municipal. En el ámbito internacional sus escritos han sabido cosechar gran éxito y admiración, y han sido traducidos a varios idiomas, entre ellos y para resaltar los más inusuales el coreano y el vietnamita.
Sugarno, si bien ha sido encasillado como novelista, es antes que nada y fundamentalmente un maestro en prosa. Sus narraciones revelan una profunda búsqueda del saber, y el querer comprender, así como una imperiosa necesidad de transmitir al lector verdades categóricas desde un ángulo intrépido y certero, porque además y en sus propias palabras para Sugarno la poesía es “rápida, sólida, fugaz y duradera”, su materia refleja un cuerpo indudablemente científico y surrealista. Su manera de ver, definir, componer y descomponer la realidad, recuerda a autores de la talla de Borges a Puig, en Argentina, quien evoca íconos literarios como Eduardo Galeano, Cervantes, Shakespeare.
El estatuto de la Academia Argentina de Letras exige que sus miembros sean argentinos y Sugarno lo es, tanto que nació en el barrio porteño del Abasto, como también que se portador de una obra que se haya distinguido especialmente en la difusión del arte literario.
Señor Académico Eher Sugarno, sea bienvenido a esta casa que de ahora en más también es suya.

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