miércoles, 18 de marzo de 2009

coleópteros IV

De alas bicolores
Sostenidos por huesos esponjosos
Bailan en parejas para aparearse.
Se alimentan de moluscos carnícos,
Sus restos fecales ricos en vitamina A

Sirven como alimento para los anfibios
Mueren como cualquier otro ser vivo
Para resucitar como hipocampo.

coleópteros III



Su alimento es el néctar

De las enredaderas.

Su forma de aparearse

Es con otras especies

Y siempre por la tarde.

Está dotado además de

Una maraña de alas

Que junto

A sus escamas combaten

Predadores indeseables de variada

Densidad




La Academia argentina de Letras se enorgullece de incorporar en nuestro selecto grupo al irresistible y valiosísimo escritor Eher Sugarno. Su hallazgo es comparable, sin temor a exagerar, al encuentro de un tesoro perdido, el cual cambiará el sentir del universo literario, ampliará las fronteras genéricas, regalándonos otros mundos imaginarios y nos posibilitará conocer un torrente de nuevos personajes multiformes.
Su escritura conjuga una exquisita alquimia, una minuciosa y despopilante enumeración científica que deleita en cada uno de sus poemas. Su particular manera de narrar resignificó los elementos de la naturaleza: la nieve tomó nuevas formas; hizo brotas raíces de terrenos pantanosos, rozando las estrellas de la perfección. Y así enriqueció el cosmos narrativo. Su pluma fue un telescopio que dilucido, con brutal nitidez, las ingravideces que otros escritores apenas pudieron divisar.
Gracias a su aporte saldremos del llano elevándonos a la cima de nuevos recorridos literarios.
Valiente conquistador, exitoso disparador de mundos imaginarios, posee la virtud de los grandes escritores: imaginar otras realidades y darles vida con minucioso arte.
Eher Sugarno, al igual que algunos pocos genios de la Literatura, deberían ser declarados benefactores universales. Su paso por este mundo no fue en vano, y, aunque la necrológica haya dicho que falleció el pasado trece de junio, podemos decir, por suerte, que su maravillosa obra desmentirá para siempre esta triste noticia.





La honorable academia de letras se complace por mi intermedio en recibir al colega Eher Sugarno, valiosísimo exponente de la literatura contemporánea, quien a través de su trayectoria nos ha revelado su innovador estilo. Asimismo nos enriquece con su vastísima obra, nutrida de poemas de las más variadas temáticas. Precursor de la poesía científica, se revela como infatigable investigador, así como también virtuosísimo compositor. A través del desapego y la ruptura de las estructuras convencionales ha logrado desarrollar una impronta inclasificable.

Reflejan nuestro orgullo de recibir a este honorable poeta, obras tales como: “Ambar amarillo”, galardonada con la Pluma de plata en el XVII Encuentro Literario sudamericano, en la que se conjugan magistralmente la descripción paisajística con la observación científica. Representa para nosotros, no sólo un excelso exponente de las letras, sino también un claro ejemplo de vida.

El señor Eher ha logrado trascender su poco convencional condición física y superar los obstáculos de la discriminación social, desarrollando un espíritu resiliente que desemboca en la creación de un nuevo ícono literario sin precedentes.

Nos honra profundamente contar con su valiosísimo aporte, el que lo convierte en uno de nuestros referentes más sobresalientes.

martes, 10 de marzo de 2009



Presentación del académico de número don Eher Sugarno


La Academia Argentina de Letras se complace, por nuestro intermedio, en recibir a un escritor brillante, todo un prodigio en literatura, que ha conquistado a críticos y lectores con sus importantes obras.


Su obra cumbre, Los poemas de la naturaleza, de 1940 fue traducida a innumerables idiomas, entre ellos, al francés, inglés y alemán.


Eher Sugarno es considerado el “padre” de los poemas naturales. Nadie como él tiene la sensibilidad para describir un ciclo de la naturaleza en poema.


Bienvenido sea, Sr. Eher Sugarno.



La Academia Argentina de Letras se enorgullece en recibir como nuevo miembro de este grupo de selectos a don Eher Sugarno, sublime creador del innovador estilo poético que los críticos denominaron como “poesía educativa”, que con el correr de los años se transformó en un método muy utilizado en la enseñanza de las ciencias biológicas en el último tramo de la escuela primaria, por el rigor científico con el que fue escrita su obra, aún sin perder la gracia de la más exquisita poesía.

El punto más sobresaliente de su obra fue el libro titulado Transformaciones, donde sobresalen los poemas “La nieve” y “El vapor de agua”, que fueron traducidos al alemán y al francés por el propio autor.

Si bien en un principio la crítica resistió su innovador estilo poético, el tiempo y su arte nos hicieron no sólo entender, sino también apreciar su peculiar forma de percibir el mundo, ganándose de a poco y con esfuerzo su merecido lugar en este recinto.


Eher Sugarno ingresa a la Academia Argentina de Letras.


Nos enorgullece presentar en este hito que es el comienzo de un nuevo siglo, a otro gran hito para la historia de la Humanidad: el ingreso de Eher Sugarno a la Academia Argentina de Letras.


Este ingenioso y talentoso escritor, hacedor de textos escolares, palabra autorizada que permite vislumbrar a los niños de nuestras aulas, de manera clara y precisa, desde los fenómenos climáticos como el ciclo de la lluvia, o la composición de la nieve, hasta la estructura del oído, como lo demuestra en su poema “La trompa de Eustaquio”.


Ha sido reconocido mundialmente por su obra más reciente, Raíces, en la que describe de manera peculiar y acertada los encantos de la naturaleza, brindando al lector una perspectiva esclarecedora.


En su obra ha logrado fusionar el amor a la poesía y su preclaridad astronómica; misturó creaciones lingüísticas con procesos químicos y bacteriológicos como ningún otro escritor de nuestra literatura.

Este pro hombre nació en Tortuguitas, Provincia de Buenos Aires, en la primavera de 1968.


Participó en antologías inolvidables como 350 poesías para niños, y ¡Upa Lalá!, el libro que enseñó a leer a tantos niños.



Nosotros, los afortunados miembros de esta Academia, tenemos el agrado de compartir esta hermosa tarde con un nuevo miembro, el Sr. Eher Sugarno, sublime actor en éste, el escenario de las letras.
Trataré de ser el puente entre los hechos que hacen a la historia literaria de Eher Sugarno y ustedes, compañeros. Grato me resulta evocar aquellas hojas doradas por el brillo que el juego de sus palabras producía. ¿Quién no recuerda “La nieve”? Las certezas que allí proclamadas fueron hoy nos traen el aroma de la palabra al servicio del mundo entero.
Tiesos, estupefactos, quedamos ante su obra; inevitable sentimiento de regocijo tendrá todo aquel que aventure sus ojos a los textos de Sugarno.
Es por esto que propongo un fuerte aplauso y el posterior brindis para recibir con el mayor afecto que la coherencia permite al genio de la literatura, el devorador de la decencia, Eher Sugarno.

lunes, 9 de marzo de 2009

coleópteros II

Boca predispuesta
caparazón consistente que lo resguarda
de depredadores
alas prestas para volar
cofrade del cocuyo y del gorgojo
elitritos córneos cubren sus alas
membranosas.
Habita taciturno en las playas
desiertas y salvajes.

coleópteros I

Estos llamativos
insectos
con caparazón consistente
mascan con su boca su alimento.
A pesar de que tienen
dos alas membranosas
están limitados para volar.

La Academia Argentina de Letras se complace en recibir al distinguido autor Eher Sugarno que con su estilo propio supo marcar una generación de innombrables poetas.

Iniciados sus estudios en la Universidad de Kennedy obtuvo una mención especial. Su esplendorosa maestría en la Universidad Interamericana y su valiosísima tesis “Como ser un hombre con tres orificios” marcaron un antes y un después en la literatura universal.

Su estudio original revolucionó la sociedad y la cultura. Su obra más recordada fue el libro “Aquello que escribo sin pensar”, publicado en 1950 y traducido a 80 lenguas e incluido entre las obras más importantes del siglo XX. Sus primeros poemas, publicados injustamente en revistas gratuitas, fueron musicalizados por Keith Richards.

Su realismo y crudeza extrema se acentuaron luego de su pelea mediática con el antes célebre Joseph Conrad. La sensibilidad de Sugarno nos lleva a conectarnos con lo más profundo de nuestro ser. Todo escritor debería leer sus primeros libros: “La poesía no es lo que parece” y “Otros poemas que aburren”.

Sugarno recibió importantísimos premios como el “Sócrates Rosado” y el “Machado de Oro”.

Esta institución se enorgullece de contar con uno de los mejores poetas en habla hispana. Sus obras ya se encuentran en uno de los anaqueles del Salón Platino de la Academia. Terminamos este humilde agradecimiento con uno de sus versos más famosos: “y el bloqueo del anhídrido carbónico”.

La Academia Argentina de Letras se complace en incorporar a Eher Sugarno como miembro de nuestra institución debido a su trabajo arduo en un recurso propio de escritura, con una marcada trasgresión de la época y una tendencia a trascender las posibilidades literarias dentro de la poesía.

Debemos destacar que se le han otorgado premios a su excelente labor de investigación. Eher Sugarno se sumerge en un estilo fantástico donde despliega su repertorio científico.

Este vanagloriado autor genera en el lector una atípica reacción en relación al contenido que brinda.

Le damos la bienvenida a esta institución y contamos con que su inclusión en ésta genere un cambio y una ampliación de diferentes tipos de vista, logrando así un crecimiento de nuestra gama expresiva y literaria.